El corregimiento
Sobre la cordillera Central y el valle superior del río Magdalena está ubicado Payandé, corregimiento de San Luis, departamento del Tolima; con una altitud de setecientos metros sobre el nivel del mar es un lugar cuyas características hidrológicas han hecho de sus ecosistemas verdaderos atractivos naturales, proporcionándole a su territorio una gran riqueza geológica por la alta composición mineral en sus suelos.
En el año 1700 durante el virreinato de la Nueva Granada, se dio inicio a la explotación de las minas de cobre de La Esmeralda, las de oro en la quebrada La Honda y El Sapo, pertenecientes a la administración de Ibagué. Esta es la historia que tiene Alveiro Medina grabada en su memoria.
“El 14 de noviembre de 1775, con la firma del nuevo Virrey, señor don Manuel de Guirior, apoyado por las autoridades civiles y eclesiásticas erige en parroquia de Santa Bárbara de la Esmeralda, en disposición que esta fecha debe ser tomada como fundación del pueblo.”
Durante 1955 y 1956 se construyó el puente que une a Ibagué y a San Luis sobre el río Coello, abriendo las puertas a la región de ampliar su sector económico con la producción agrícola, ganadera, el tabaco y el café; además aparecen oportunidades en la minería, el turismo, entre otras.
Travesía mágica el cobre
El camino empieza a las ocho de la mañana, son dieciocho kilómetros de trayecto, un recorrido a pie que transcurre en unas ocho horas, atravesado por hermosos y coloridos paisajes que se transforman a lo largo del camino. La diversidad de la ruta se evidencia al comenzar, un largo camino en medio del plan que luego se va transformando a un territorio más árido y seco donde se pueden apreciar una gran historia geológica y paleontológica: es decir el encuentro con fósiles y piedras talladas por el viento y el agua con miles de años de existencia.
A medida que el trayecto avanza se escucha solo el ruido del viento y uno que otro bichito que habita el lugar, las refrescantes aguas de la quebrada El Cobre que cubren la región aparecen como un manifiesto de descanso y frescura a los caminantes. De nuevo el territorio se transforma, aparecen el musgo, las piedras grandes y la sombra de árboles que cubren la fauna del lugar. Las grandes piedras que acompañan el descenso son un reto bien puesto para poner a prueba cada pisada.
Luego de ocho horas de aventura por un sendero retador, un recorrido que solo unos pocos conocen denominado: ‘Travesía mágica El Cobre’, por Alveiro Medina, guía turístico de Payandé y quien diseñó la ruta, llega a su fin en La Cueva del Mohán, hoy conocida como el Ecoparque El Mohán.
Un guía
Alveiro Medina Preciado es oriundo del centro poblado corregimiento de Payandé, municipio de San Luis, guía de turismo en su región y apasionado por entender su territorio, Alveiro considera que la labor de hacer guianza requiere de compromiso y responsabilidad para explicar a los turistas el contexto de su región desde diferentes ángulos, sean sociales, ambientales, culturales y económicos.
Para Alveiro la preparación de un guía turístico se articula con las necesidades de los turistas, pues ellos son los encargados de brindar una buena imagen del territorio conociendo las diversas unidades de prestación de servicios, hoteles, restaurantes, transporte, espacios recreativos, además del acompañamiento y la seguridad.
Su labor se ha destacado por brindar a los turistas, rutas llenas de historias, invitar a sus conciudadanos de manera constante a que se preparen y den a conocer su territorio. Abrir las puertas de su saber a propios y extraños, todo lo que esté a su alcance para que su región sea cuidada y conocida de la mejor manera.
Turismo responsable
Que Payandé sea reconocido como un destino turístico es fundamental, pues ayuda a dinamizar la economía local con el aumento de la demanda en bienes y servicios, fomenta nuevos empleos y el desarrollo y fortalecimiento de emprendimientos.
Todo lo anterior es saludable para el territorio en la medida que los lugares promocionados tengan el aforo adecuado para mantener un equilibrio entre el cuidado ambiental y el aumento de la actividad económica. Esta es la conclusión de Alveiro:
“Debemos tener en cuenta que detrás de nosotros hay otras generaciones y que su bienestar depende de qué planeta les vamos a heredar. Por eso debemos de actuar responsablemente.”